En media hora se han agotado las escasísimas entradas que el Athletic ha puesto a la venta este viernes en las taquillas de San Mamés quedándose la mayor parte de los aficionados que esperaban conseguir un boleto sin ellos, lo que ha provocado protestas ante las ventanillas.
Más de un millar de seguidores rojiblancos han hecho cola durante toda la noche pasada (los primeros de la fila llegaron a las nueve y media de la noche del jueves), pero apenas un centenar se han hecho con entradas para el derbi de Anoeta.
El resto, después de horas a la intemperie soportando temperaturas bajísimas, lluvia y granizo, han visto cómo se quedaban sin entradas, lo que ha provocado protestas generalizadas y una enorme decepción.
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